Domingo.

El día nacional del “mañana empiezo”.

Del sofá.

Del móvil pegado a la cara.

Del “toco un rato… o mejor no”.

Hoy es el día perfecto para abandonar.

Para decirte que no vales.

Que ya estás mayor.

Que no tienes talento.

Y que el piano, total, era solo un antojo más.

Y lo peor es que suena lógico.

Tiene sentido.

Es cómodo.

Por eso tantos lo hacen.

Abandonar, digo.

Pero tú no.

Tú hoy también te vas a sentar.

Aunque suene a rayos.

Aunque te duela el cuello.

Aunque no tengas claro para qué.

Porque el que se sienta hoy, cuando nada invita a hacerlo,

mañana está más cerca de que le suene bien.

Esto no va de inspiración.

Va de resistencia.

Y si no lo tienes claro, tranquilo: 

Estoy creando un espacio para los pianoadictos que quieren disfrutar del piano.

Los que han tomado acción y se han apuntado, ya están empezando a recibir cosas mientras tú estás fuera.

Y ahí sí. Ahí es cuando te vas a arrepentir de no estar.

👉 Pero aún puedes apuntarte.

Y dejar de quedarte fuera cuando lo único que te separa es un clic.

Pasa un día espectacular.

Javi

P.D. Reenvíalo a quien lleve años diciendo “este año sí me pongo” y necesite una patada, no una palmadita. Y si lo estás leyendo de rebote, únete aquí.