Todos vamos a morir. De eso no hay duda. No está en nuestra mano evitarlo.

Lo bueno es que sólo pasará una vez.

O tal vez no. Puede que tú seas de esas personas que mueren dos veces. Una, en la que vas al otro lado y vuelves para contarlo. (las llamadas ECM, pero eso otro día).

Y otra, en la que vas y ya no vuelves.

Lo que te he dicho, eso no lo puedes evitar.

Entonces, Mertxe, de que va eso de morir mil veces.

Va de las "muertes" cotidianas.

Todas esas veces que estás sin estar.

Qué pasa el día y parece que le hubiera pasado a otro.

Que haces cosas que no te gusta hacer.

Qué estás con gente que no te interesa.

Que ves una serie que no te dice nada.

Qué no ríes fuerte por no molestar

Qué no te atreves a dar ese paso, ese que tú sabes, por miedo a fallar

Qué no te expones por vergüenza.

Qué no dices lo que piensas por temor.

Qué no eres tú mismo para que no te juzguen

Hay tantas muertes pequeñas cotidianas.

Te propongo salir de ahí.

Aprender a vivir cada momento.

Estar en el aquí y ahora.

Atreverte a dar ese paso.

Reír, reír con ganas.

Ser quien eres y disfrutarlo.

¿Te gustaría?

Cuídate, 

Mertxe 

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