los humanos no funcionamos con reglas de tres
Jun 12, 2025 2:01 pm
Hace justo una semana en el gym, mientras hacía un ejercicio de gemelos, fui testigo de una conversación entre una mujer y un hombre.
- (ella, tras acabar una serie de press banca) han salido 5 repeticiones, no?
- (él, haciendo de "fitness coach") sí; aunque la última no la daría como válida
- (ella) bueno, pues 4 entonces
- (él) sí
- (ella) si he hecho 4 con 40kgs, podré hacer 2 con 45kgs…
- (él) uff, no sé, 1 debería de salir, pero 2…
- (ella) sí, sí, debería de ser capaz de hacer 2…
No pude evitar sonreír, ya que en el pasado tuve momentos similares:
"¿Si he hecho 5 repes con 80kgs, cómo no voy a ser capaz de hacer 2 con 120kgs?"
Spoiler: Nunca pasé de 2 repes con 107.5kgs.
Ahí aprendes que las matemáticas no son ciencia exacta dentro de un gym.
Las respuestas no son lineales.
En lo relacionado con conseguir clientes, como en el gym, tampoco lo son.
Que seas capaz de conectar con un founder en LinkedIn mediante un mensaje personalizado no significa que conectarás con 10 founders enviando 10 versiones del mismo mensaje.
Que consigas una discovery call de cada 20 mensajes enviados no significa que conseguirás 5 discovery calls enviando 100 mensajes copy-paste.
Que un mensaje directo funcione con cierto tipo de prospect no significa que el mismo enfoque funcionará multiplicando el volumen sin ajustar el contexto.
La prospección, como la vida, está llena de respuestas no lineales:
- Enviar ese mensaje extra que demuestra que realmente entiendes su problema puede hacer que acepten hablar contigo
- Enviar 47 mensajes genéricos en una tarde puede hacer que LinkedIn te limite la cuenta y los prospects te ignoren
- Mencionar un insight específico sobre su industria puede generar interés
- Bombardear con 10 insights diferentes puede hacer que parezcas desesperado por demostrar lo mucho que sabes
Muchos profesionales caen en esta trampa cuando hacen prospección.
Piensan que la ecuación es simple: más mensajes = más respuestas = más discovery calls.
Pero la realidad es más sutil.
A veces, un mensaje bien pensado a la persona correcta en el momento adecuado vale más que 100 mensajes genéricos.
A veces, esperar una semana antes del segundo contacto es más efectivo que enviar un follow-up al día siguiente.
A veces, no enviar nada después de conectar y esperar a que publique algo relevante es la mejor estrategia.
¿Por qué?
Porque estamos tratando con humanos, no con máquinas.
Y los humanos no funcionamos con reglas de tres.
El miércoles 18 de junio tendremos un workshop para aquellos que quieran dejar de ser EyaculaPitch precoces en LinkedIn.
Un workshop donde veremos, entre otras cosas, cómo escapar de la falacia lineal en prospección.
Cómo enviar menos mensajes pero conseguir más conversaciones.
Cómo evitar que tu nivel de hambre sabotee tu capacidad de pescar.
Para que puedas recibir mensajes como este:
¿Quieres info? Responde "falacia lineal" y te la paso.
Ángel.