Mitad de semana y ya hay quien está pensando en dejarlo.

“Esto no es para mí”

“Estoy mayor”

“No me sale este compás sin parecer que estoy tecleando en un cajero automático”.

¿Te suena?

Pues déjame decirte algo que no se dice mucho:

Te cuesta porque estás haciendo algo que muy pocos tienen las narices de hacer.

Y no hablo de tocar el piano como Lang Lang con la mano izquierda atada a la espalda.

Hablo de sentarte, día tras día, a entrenar una habilidad que requiere paciencia, repetición, y la humildad de sonar mal antes de sonar bien.

Mientras otros hacen scroll en Facebook, Instagram o TikTok, tú estás ahí:

🔸 Peleándote con la mano izquierda

🔸 Repitiendo ese compás que parece escrito por un enemigo

🔸 Afinando dedos que llevan 40 años escribiendo pero no tocando

Y eso, querido pianoadicto, te convierte en alguien muy poco común.

Porque cualquiera sube un TikTok tocando tres acordes con cara de haber descubierto el fuego.

Pero no cualquiera entrena cada semana con la fe de que algún día eso sonará como lo sueña.

Así que hoy no vengo a venderte la moto, ni a decirte que todo es fácil.

Solo vengo a recordarte esto:

✔️Estás donde muchos sueñan estar pero no se atreven a empezar.

✔️ Y aunque aún no suene como tú quieres, ya suenas más lejos que ayer.

Estoy construyendo un espacio donde quizás quieras estar.

Un lugar donde se aprende sin postureo, se avanza sin presión… y se celebra hasta el más torpe de los errores.

Los que ya están esperando, están recibiendo avances especiales cada Viernes.

Y este viernes les voy a mostrar algo muy Top​​​​​​, para que me den feedback y podamos seguir avanzando juntos.

Si tú también quieres verlo, formar parte desde el principio y tener condiciones especiales cuando abra...

👉🏼 Apúntate ya aquí.

Apuntarte, no te compromete a nada, es gratis, y te irás enterando de todo lo que se está cocinando.

 (En Julio ya no podrás, porque cerraré la lista de espera, así que aprovecha ahora para no arrepentirte después).

Pasa un estupendo día,

Javi

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