La contaminación química: un límite planetario todavía invisibilizado

La contaminación química es un límite planetario que se ha calculado que ya hemos rebasado, recientemente. Para disminuir su impacto, existen proyectos como el proyecto Life AskREACH y su app Scan4Chem, que necesita la colaboración de todos los actores de la sociedad, incluyendo las empresas, para tratar de volver a la zona segura.

La ciencia ha establecido nueve límites planetarios para medir el estado de ciertos aspectos y dinámicas que posibilitan que en la Tierra la vida exista tal y como la conocemos actualmente. Algunos de esos límites se refieren a aspectos bien conocidos como son el calentamiento global, la pérdida de biodiversidad o la capa de ozono. Pero hay otros factores que no son tan conocidos, uno de ellos es la contaminación química o la incorporación de nuevas entidades al sistema planetario.

El estudio “Outside the Safe Operating Space of the Planetary Boundary for Novel Entities“, publicado por la American Chemical Society en enero de 2022 afirma que ya hemos superado la zona segura y, en consecuencia, el equilibrio del ecosistema planetario se encuentra en riesgo. Esto no quiere decir que hayamos alcanzado el punto de no retorno, y por eso se hace necesario difundir este conocimiento para que todos los sectores de nuestra sociedad se pongan a trabajar para volver a la zona segura.

Afortunadamente en Europa no partimos de cero ya que existe un reglamento que regula los productos y sustancias químicas que se comercializan: el Reglamento REACH. Vigente desde 2007, gracias al cual se creó la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA por sus siglas en inglés) cuya competencia es registrar y evaluar las sustancias que se comercializan en la UE y, a su vez, regular –y prohibir si fuera necesario– las más dañinas: las denominadas sustancias extremadamente preocupantes (SEP o SVHC por sus siglas en inglés).

La tipificación de una sustancia como SEP, conlleva ciertas obligaciones para las empresas: hay que notificar a la ECHA de su uso y del seguimiento que se hace de la sustancia y, por otro lado, deben de comunicar a sus clientes del uso de dicha sustancia y la forma de manejarla de manera segura.

Esta última obligación es lo que se conoce como el “derecho a saber”, basado en el artículo 33 del Reglamento REACH, que le confiere al cliente el derecho a conocer si el producto que adquiere contiene SEP por encima del 0,1% de su peso. En este marco nace el proyecto Life AskREACH, iniciado en 2017, orientado a fomentar el consumo consciente de artículos de consumo y facilitar la comunicación entre empresas y clientes.

En España este proyecto y su app para teléfonos móviles, Scan4Chem, han comenzado a funcionar recientemente, a través de la colaboración de la Agencia Medioambiental Alemana (gestora y coordinadora del proyecto) y la Fundación Vida Sostenible (responsable en España). En este sentido se está haciendo un llamamiento a las empresas para que colaboren para controlar la contaminación química y reducirla. Aunque existen diferentes actores con capacidad de influir en este objetivo, la toma de decisiones sobre los procesos productivos recae sobre las empresas, otorgándoles a estas una responsabilidad clave y única.

Esta responsabilidad también tiene sus beneficios. Actualmente en Europa las tendencias políticas están encaminadas a unos mayores cuidados del medio ambiente y el factor climático es una señal evidente para extremar cada vez más estos cuidados. En este sentido, el proyecto Life AskREACH supone para las empresas una ventaja competitiva puesto que muestran al cliente su compromiso con el medio ambiente y la transparencia. Además, desde un enfoque legislativo, registrarse y subir información a la base de datos que ofrece Life AskREACH supone evitar penalizaciones por no cumplir con las normativas, y estar más preparadas para regulaciones que cada vez serán más restrictivas.

Por ello queremos hacer un llamamiento y una invitación a las empresas para que pasen a ser partes activas y se registren en este proyecto. El registro de sus productos servirá para informar a sus clientes sobre el contenido SEP de sus artículos. De esta manera, los clientes tendrán acceso fácil a la información sobre qué productos no contienen SEP y a la información de cómo manejar de manera segura los artículos que sí los contengan. 

Para más información sobre el proyecto Life AskREACH, la aplicación Scan4Chem o el registro y manejo de datos para las empresas, recomendamos consultar esta página web o ponerse en contacto con el proyecto por medio del correo askreach@vidasostenible.org.

Equipo Fundación Vida Sostenible

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