, hoy quiero compartir contigo la historia inspiradora de Grace, una enfermera de 38 años que vive en Los Ángeles.

Su testimonio real te hará reflexionar sobre la importancia de amarte a ti mismo y cómo eso puede transformar tu vida por completo.

Desde pequeña, Grace siempre se sintió a la sombra de su hermana menor, quien parecía tenerlo todo: belleza, facilidad para aprender y alcanzar sus metas, y un encanto natural. Sus padres parecían tener ojos solo para ella, lo que hizo que Grace se diera cuenta de su propia inseguridad.

Con el paso del tiempo, Grace intentó encontrar su valía en la aprobación de los hombres, pero sus intentos resultaron en fracasos. Aunque le decían que era maravillosa, siempre había un "pero" que la dejaba desanimada.

Como resultado, decidió refugiarse en su trabajo, dedicando largas horas y sacrificando su vida social por completo.

Sin embargo, todo cambió cuando conoció a alguien especial en el restaurante del hospital. Este hombre admiraba profundamente a las personas que trabajaban por el bienestar de los demás, y su compañía le brindó a Grace una nueva perspectiva de la vida. Se sentía diferente y finalmente experimentaba la felicidad.

Pero un día, mientras se miraba al espejo y se preparaba para salir, se vio reflejada en una mujer de casi cuarenta años que apenas conocía. En ese momento, Grace se dijo a sí misma: "Vas a morir sin haber vivido casi nada".

Fue entonces cuando decidió hacer algo por sí misma.

Recordó los consejos de una amiga que le hablaba sobre cómo la psicoterapia había cambiado su vida, y así comenzó su hermosa experiencia de aprender a quererse.

Poco a poco, en cada sesión, Grace descubrió su propia valía y comenzó a sentirse digna de vivir, ser apreciada y amada.

Aprendió que el amor de los demás es un apoyo, pero no un salvavidas. Según el psicólogo francés Christophe André, aquellos que se aprecian a sí mismos no necesitan a otra persona para sentir que existen. Eligen tener parejas y amigos sin la intención de llenar un vacío, y establecen vínculos basados en la confianza y el compromiso.

Aunque escuchaba muchas veces acerca del valor y el cuidado personal en diferentes medios, no fue consciente de que esto estaba relacionado con aprender a quererse a sí misma.

El proceso fue doloroso, pero también hermoso, ya que ahora Grace comprende que si no se quiere a sí misma con calidad de amor, los demás no sabrán cómo hacerlo.

La historia de Grace es un recordatorio de la importancia de amarnos a nosotros mismos y cultivar una buena autoestima.

Solo cuando nos valoramos y nos tratamos con amor y respeto, podemos experimentar relaciones saludables y una vida plena.

Recuerda que a Dios le importa tu salud mental. 

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Recibe un abrazo enorme desde Austin, Texas.

Sheila Morataya

Autora "Yo soy único e irrepetible"

Psicoterapeuta y Life Coach

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