Consejos vendo y para mí no tengo
Oct 13, 2024 6:31 am
Antes de dar un consejo, pregunta.
Punto.
Pregunta a esa persona si quiere un consejo.
Pregúntate por qué quieres aconsejar.
Pregúntate de qué tienes prisa.
Pregúntale si quiere escucharte.
¿Puede escucharte?
Querer ayudar es algo humano.
Esto es así.
Sencillo.
Bello.
Ahora bien...
Querer ayudar
y ser de ayuda
son cosas
muy diferentes.
Ser de ayuda es un arte.
A veces, involuntario.
Como dice el acuariano Charles Lamb:
La prisa es del diablo, la paciencia es de Dios.
Tener prisa por solucionar problemas.
Querer dejarlo todo resuelto rápido
Cerrar ciclos ya, ya, ya.
Apagar incendios.
Ayudar a que otros lo hagan.
Ay, virgen santa...
Consejos vendo y para mí no tengo.
Este refrán es gloria bendita.
Hace 3 años recibí un maravilloso taller de Azahara Alonso.
Azahara Alonso es escritora, arquitecta de la imaginación
y embajadora de la bella tierra de Asturias.
El taller se llamaba: Contra la prisa
Entre las mil perlas que Azahara representa y nos compartió,
estas líneas de Rebecca Solnit fueron una de ellas:
Deja la puerta abierta a lo desconocido, la puerta tras la que se encuentra la
oscuridad. Es de ahí de donde vienen las cosas más importantes, de donde
viniste tú mismo y también adonde irás.
Las cosas que deseamos son transformadoras,
y no sabemos lo que hay al otro lado de esa transformación.
El amor, la sabiduría, la gracia, la inspiración: ¿cómo emprender la búsqueda de cosas que, en cierto modo, tienen que ver con desplazar las fronteras del propio ser hacia territorios desconocidos, con convertirse en otra persona?
La comunicación.
La artesanía.
Labores que van de la mano.
Y son lentas, además.
No buscamos la perfección.
Buscamos la conexión.
Anhelamos la belleza.
Deseamos unos ojos amables en los que mirarnos.
Última llamada para la Reunión del miércoles.
Iremos lento.
No daremos consejos.
Nos preguntaremos.
PS: hoy a las 13:13 se cierran inscripciones.
PS2: antes de dar un consejo, pregunta.