Digamos que cuando trabajas, pueden pasar 3 cosas:

1) Das lo justo, lo que se supone que debes de dar.

2) Das a la baja, menos de lo que se supone que debes de dar.

3) Das a la alta, mucho más de lo que debes dar.

¿Tú, qué?

¿1?

¿2?

¿3?

Es bueno saber en qué grupo estás.

Cuando lo sabes, pasan cosas interesantes.

Una de ellas es que sabes leer con quien te encuentras.

Para entender mejor a donde quiero ir, te cuento lo que nos pasó ayer.

Fuimos a comer un arroz del senyoret.

Era una gran celebración y mis tíos decidieron este plato que, por si no lo sabes, está hecho con el arroz típico de la Comunidad Valenciana sin embargo, el marisco y el pescado se presentan limpios y pelados, para que los comensales más fisnolis no tengan que ensuciarse las manos.

A mí la verdad es que lo que más me gusta hacer con el pescado y el marisco es nadar.

Y además, me encanta comer con las manos.

Así que, nada.

Pero weno...

Ahí te lo dejo como dato porque me parece interesante y maja la cosa.

G-astronomía is da best!

Pues eso, resulta que encargamos un arroz del senyoret para 13 y...

What happened?

Madonna santa!

Nos trajeron una paella para 26 personas.

Te digo que no exagero ni una chipitina.

Te lo juro por mis cascas y Stevie Wonder.

Menuda barbaridad de paellón, carajiiiiillo.

Salimos del restaurante con 3 tuppers a reventar porque no podíamos dejar toda esa comida para tirar.

Esta semana va a ser dieta de arroz del senyoret para quien yo me sé.

Bon profit!

El personal de este restaurante, Il Fratelli para quien quiera saberlo, era puramente colombiano. Yo creo que quizás por eso nos sirvieron tan generosamente.

Mi experiencia, que puede ser diferente de la tuya, es que nunca me han servido tanto en un lugar de la Terreta.

Esto no tiene nada de bueno, ni nada de malo.

Es un simple hecho y lo comunico como tal.

Ayer nos llevamos 3kg de sobras.

Eso...

Eso claramente es estar en el grupo nº 3 de los que citaba al comienzo.

A mí me gusta mucho ese grupo.

No sé por qué pero me identifico bastante con esa manera de hacer.

Y con el curso que estoy grabando de cascas, lo estoy descubriendo aún más.

Como he dicho al principio, lo importante es saber dónde estás.

Esa es la única manera de decidir si quieres seguir ahí o no.

En mi caso, estoy muy satisfecha de cómo estoy elaborando este curso.

Además, he contado con la ayuda de 10 manos, ojos y orejas que me han hecho llegar a lugares a los que yo sola, imposible. A esto lo he llamado el Consejo de Cascas.

Otro día cuento más cosillas de esto porque aquí hay mucha miga.

Pondré el curso a la venta del 7 al 21 de septiembre.

Lo haré a través de Galaxia Cascas.

Y si queda alguna plaza libre, lo contaré por aquí.

Si esto te interesa, te sugiero que te apuntes aquí.

Esa es la única manera de que tengas los detalles de todo antes que ningún otro lugar.

Si no te interesa, pues claro, no lo hagas.

Aunque también te digo...

Quizás, sólo por apuntarte, recibes algo más de lo que esperas

(ese es mi estilo)

(3)

En cualquier caso, es tu decisión.

Y como es tuya, hay que respetarla.

Ámen.

Abrazos desde una humedad que no se pué explicar.

Menos mal que con los cascas se restablece el clima interior.

Que pases un día chachi.

PS: apúntate antes del miércoles si quieres saber algo que aún no he dicho.

PS2: en el naranjita.