Entre inundaciones, aparece Piano Delfín.

Hoy que soplo velas, emerge a la superficie.

Gracias por acudir.

Grabé este garbancito de música el 22 de mayo en Berlín.

La historia que la acompaña es que fui a visitar a mi querida Claire-Ann.

Estuve unos días en Hamburgo.

De ahí a Berlín hay un pedo.

Hay que visitar a las amigas siempre que se pueda.

Escríbetelo cerca:

Vsitar a tus amigas siempre que puedas.

Después de desayunar, Matze y yo nos metimos en el estudio.

Mi partitura era todo lo que había vivido en Hamburgo.

Fueron 3 días de muchos encuentros en el Body Rhythm Hamburg.

Tenía que sacar todo eso de alguna manera.

Todo lo que no se saca, se pudre.

Matze le dio al rec.

Salió lo que salió.

Piano Delfín.

Al final, si te fijas en el 5:12, él me pregunta:

- ¿Es esta una de tus obras?

Yo me medio río.

La acabo de improvisar.

¿Es mía?

Le dije que sí.

Arreando.

Hoy esta canción es tuya.

Es un tiempo sumergido en el sonido.

Es un lugar-casa independientemente de las mareas.

Inundaciones reales o metafóricas,

Piano Delfín acudirá donde estés.

Sólo dale al play.

Piano Delfín buceará en tus oídos.

La gran capacidad de generar recuerdos de los delfines

hará su magia siempre que la escuches.

En la descripción del vídeo encontrarás maneras

de echar un cable por los pueblos de Valencia.

O, aún más importante, de recibirlo.

Estamos en un momento en el que practicar pedir ayuda y apoyo es crucial.

Permitirnos recibir el cable es mi deseo para esta nueva vuelta al Sol.

Hoy me permito recibir todos los cables que se puedan.

Tengo el corazón apretao.

Se están destapando realidades muy turbias y desoladoras.

Realidades que son fruto de decisiones que abandonan la vida.

Decisiones que pretenden que normalicemos.

Y no es normal.

Lo que está pasando no es normal.

Dejar morir a personas, animales y tierras no es normal.

Asumir un trabajo y sus privilegios sin hacerse cargo de las responsabilidades es una de las cargas humanas que nos toca transformar en estos tiempos.

No es normal.

No lo consiento.

En ningún lugar del planeta Tierra.

Joder...

¿Qué es esto?

En cualquier caso...

Es muy bello ver cómo acuden los delfines.

Hay una gran marea de personas como tú y como yo creando red.

Ayudando con cosas pequeñas.

Mi madre y yo hemos comprado compresas, lejía, vinagre y papel.

Gracias infinitas por cada gesto que hacemos.

Estamos viendo cosas muy duras.

Y también, brillos muy poderosos.

No dejemos de ver el brillo.

Cuidemos nuestra chispa.

PIANO DELFÍN

Comparte con quien necesite un delfín en sus oídos para navegar océanos.

PS: te recuerdo que hoy es el último día de Ritmo y Juego a 40€. A partir de las 23:57, el precio sube. Este es otro regalo de cumple que me estoy haciendo: valorar lo que hago cuando lo comparto.