Antes de hablarte del primer concierto que haré en mayo por tierras catalanas, déjame contarte algo.

Ayer vi un vídeo de Robin Williams junto a Jack Nicholson.

Casi me da un patatús.

Cusha.

Situémonos.

Robin Williams.

Patch Adams.

El Club de los Poetas Muertos.

El indomable Will Hunting.

Hook.

Flubber.

Jumanji.

Cada una de estas películas me flipan.

O me fliparon en mi infancia.

Jack Nicholson.

Alguien voló sobre el nido del cuco.

El resplandor.

Mejor imposible.

Ahora o nunca.

Virgen santa, aquí hay mucha tela para cortar.

Estos dos actores han habitado personajes muy escandalosos.

Arcos emocionales inmensos e intensos.

Historias conmovedoras, aterradoras o pa morirse de risa.

Me encontré con un vídeo del 17 de enero 2003 que no tiene desperdicio.

Era una ceremonia de honor para gente del cine.

Trajes elegantes.

Mesas redondas con champán.

Tacones que ni el Himalaya.

Salma Hayek tiene que entregar un premio y dice:

- Drama, drama. No os lo vais a creer pero ha habido un empate.

Los nominados son:

Daniel Day Lewis

Jack Nicholson

Robin Williams

En estas galas de premios y tacones himalaya, el ganador es uno.

El único.

No hay más opciones.

Pero aquí hubo un empate y el premio se lo llevaron Daniel Day Lewis y Jack Nicholson.

Pero...

¿De verdad no hay más opciones?

Agárrate que vienen curvas.

Ojo cuidao.

Cuando sube Jack, ¿qué hace?

Llama a Robin.

Y Robin sube al escenario escopetao.

Lo que sucede en ese escenario es pura una divinura improvisatoria.

Menuda marimorena.

Básicamente lo que sucede es que Robin, que no ha sido premiado, empieza una marimorena en la que toda la sala se están meando de la risa.

Jack en un momento se dobla hacia abajo de la carcajada.

Y Robin...

Madre mía, lo de Robin es estratosférico.

Muchas veces nos preguntamos:

¿Qué hace falta para improvisar?

Ese vídeo es un ejemplo.

También lo será el concierto que haré el 22 de mayo en Sant Cugat.

Toma nota porque va a ser muy chulo.

Hay un ciclo que se llama:

La Cambra del Ateneu

Un jueves al mes se hacen conciertos de pequeño formato y gran calidad que pretenden acercar en la ciudad propuestas musicales de estilos diversos en su estado más puro:

Con poca o ninguna amplificación.

Y con el público muy próximo.

Esto último me encanta.

Estaremos muy cerca.

Yo con mi diversidad y tú con la tuya.

Nada puede ir mal.

¿Qué tienes que hacer para venir?

1. Saber si tienes libre el jueves 22 de mayo a las 19h.

2. La entrada es gratis. Quizás creas que esto es guay pero quizás no lo es tanto porque el aforo es limitado y sólo se abren las inscripciones una semana antes. Tienes que apuntártelo en tu calendario si te interesa.

3. Venir.

Esto último es muy importante.

Para venir tienes que querer venir.

Lo aclaro porque aunque no lo creas, hay gente que está confundida.

Hay quien dice "quiero ir" en realidad no quieren ir.

¿Es un problema no querer ir?

Noooooo.

Para ná.

Es mejor no ir si no quieres.

En este caso, como el aforo es limitado y estaremos muy cerca, si quieres venir tienes que tenerlo claro para reservar una semana antes.

Yo sí que voy a ir.

Tengo la fecha reservada desde el año pasado.

Nunca antes había anticipado algo tanto en mi agenda.

Es casi como si me fuera a casar.

¿Datos de la boda?

Aquí los tienes.

Aunque aún no podrás reservar.

¿Cuándo podrás reservar?

Jueves 22 de mayo a las 19h es el concierto.

Una semana podrás reservar.

Haz tu el cálculo.

La Cambra de l'Ateneu.

Qué chachi suena.

Gracias por invitarme.

PS: habrá nuevas canciones. Y esta que ya tiene unos años, también.