¿Y que estás haciendo ahora?
Jul 09, 2025 11:11 am
Y la vida nos regala encuentros y desencuentros.
Así es como debe ser… para mantener el equilibro.
LQ
Ayer viví las dos cosas:
1) Desencuentro.
Mi ordenador hizo pumtz después de casi 10 años. Yo quería creer que el cargador se había escachuflao. Resulta que no, que es el ser cargante quien va a pasar a otra dimensión. Gracias por tantas horas, horas y horas.
Has sido una buena aliada y has aguantado lo que no está escrito en forma de edición de vídeo, grabación de canciones, potoxó y otras decenas de tareas que no nombraré para que mis amistades del Noticiero Crisálido no se me aburran.
Pero eso, Macnífica, muchas gracias por todo y que te reúnas con tu familia digital allí en donde vayan a para los espíritus de las manzanas.
2) Encuentro.
Con un amigo del instituto.
Sí, de esa clase de guapos de la que hablé el otro día.
Hip hop alliance.
Nos abrazamos.
Blablabla.
Blublublu.
Alegría p’aquí y p’allá.
Le pregunto un par de cosas de las importantes.
Me cuenta cosas varias.
Entre ellas, que ha decidido ir a por su sueño y se quiere presentar para policía.
Avanza la conversación.
Me pregunta sobre mí y le cuento sobre el entierro de mi ordenador.
Penita p’aquí, penita p’allá.
Ahí él me enseña que esta mañana se le ha caído el móvil (como si fuera de un rascacielos) mientras hablaba por teléfono con una amiga que no es amiga y con la que sabe que no va a sentir el amor. Lo digo textualmente como lo recuerdo desde mi memoria.
Sabemos que nos gusta el cotilleo aunque lo neguemos.
Nuevamente me vuelve a preguntar sobre mí.
¿Y que estás haciendo ahora? Porque tú siempre estás haciendo cosas, Cristi,
Me quedo en silencio.
Breve.
No un minuto pero tampoco respondo de golpe.
No me gusta responder cualquier cosa.
(y menos aún a un futuro policía guapo)
Ah!
Lo tengo.
Ya sé lo que le voy a contar de lo que estoy haciendo.
Pues mira, estoy yendo a terapia.
Es de lo mejor que he hecho en mi vida.
Qué bien pedir ayuda.
Ahora es él quien se queda en silencio.
Breve.
Menos de un minuto… se siente la tensión.
(uy, uy, uy, la virgen)
Seguimos charlando.
Me cuenta qué es lo que hace como terapia.
Es una respuesta típica de muchas personas.
Le dije que “eso”, y todo, puede llegar a ser terapéutico pero que “eso” no es terapia.
(no lo es, la terapia es otra cosa y se hace acompañada)
A veces lo que para una es un encuentro para otro es un desencuentro.
Pasas que cosan, oye.
Y así debe ser para mantener el equilibrio en la vida.
Hoy es 9 de julio.
En 5 días mis prácticas astrológicas subirán de precio.
De 44 a 49.
Nunca más bajarán.
(otras cosas en la vida sí que bajarán pero no esta)
No sé si es mucho o poco pero es un cambio.
La vida es puro cambio, shosho.
Y cuando algo no cambie… alarm!
Esto es puntal desde el punto de vista ético:
Una lectura astrológica no es terapia tampoco.
Ni un consultorio amoroso.
Ni una loba de cristal que te dirá qué número de lotería comprar para que te toque el gordo.
El lenguaje astrológico, más bien, señala otra cosa.
Señala donde ya tienes el gordo y aún no te has dao cuen.
Ojo cuidao.
Ese, por lo menos es mi enfoque.
Y lo seguirá siendo porque este mundo merece a seres humanos que se sientan con confianza para compartirse tal y como son y dejar ya de imitar a tal o pascual.
Para mirar a tu gordo, aquí mismito.
Si prefieres vivir de dieta toda la vida, no se te ocurra mirar.
Abracicos.
Que pases un día chachi.
PS: todos mis lamentos y empatía para todas las criaturas tecnológicas que están cambiando de barrio. Uranitooooooooooo.
PS2: hay un planeta que, entre otras tantas cosas, habla de la tecnología, lo disruptivo y la incertidumbre.
PS3: tú tienes a ese planeta en tu carta natal y mirarlo puede ser muy beneficioso para conocer y respetar un poquito más tu voltaje eléctrico. Hay cosas ingobernables dentro de cada cual y lo mejor que podemos hacer es fluir con ellas. Nunca reprimirlas.
PS4: más detalles en el naranja.
PS: Loli, buen viaje querida.