Lo que dice Björk de spotify
Nov 17, 2025 2:08 pm
Dentro de unos días será el cumple de una de las humanas más bellas, inquietantes, misteriosas y creativas que sé que existen en este planeta.
No es plato ligero.
Pero tampoco es pesado.
Esta es la parajoda de algunas artistas.
La profundidad está asegurada con Björk.
En un momento te cuento cómo se lee esto astrológicamente.
Ahora, una noticia que aún no había comunicado aunque lo hice hace ya un mes largo.
Esta es:
He retirado toda mi música de spotify.
Todo empezó cuando me enteré de que el CEO (el que mueve el cotarro) de Spotify había decidido invertir 600 millones de euros en armamento militar y desarrollo de inteligencias artificiales a favor de la guerra.
Daniel Ek se llama el mozo.
Al saber esto algo me hizo crack-catacrack internamente.
Bueno, últimamente muchas cosas me hacen crack.
Por suerte, sé que no hay nada de malo en romperse.
Las grietas son milagrosas.
La noticia salió en junio, yo me enteré un poco después.
Clara Peya dijo algo y planté orejas.
Investigué y... pastelón marrón oscurito.
Para ponerte en contexto:
Ya me costó bastante decidir subir mi música a esta plataforma.
Por alguna razón, no me daba buena espina.
Me pasaba algo parecido como con guasap, me lo instalé un poco por curro y porque me lo habían recomendado pero, no sé por qué, cuando usaba la app no me encontraba bien y me tuve que salir.
Vete tú a saber qué le pasaba a mis moléculas.
Cuando estuve de gira en Rusia, fueron varias las personas que me dijeron:
¿Por qué no subes tu música a Spachifay y así te podemos escuchar?
En Rusia sí que nos dejan tener acceso a Spachifay.
Upload it, pleaseeeeee!
Nunca antes, personas de tan lejos, me habían dicho que querían escucharme.
Me sentí halagada, la verdá. Sentirse reconocida es algo bello.
Y claro, me tocó.
Tardé un tiempo pero finalmente, lo hice.
Subí mi música a sputinfly.
(el final creo que ya lo hueles)
Desde entonces, todo lo que he publicado, lo he subido a diferentes plataformas, entre ellas (hay más):
Spotify
Apple Music
Deezer
Tidal
Youtube
...
Bandcamp
Esta última opción, realmente, es la más equilibrada para quienes nos dedicamos a la música porque da la opción a compra directa.
Pones un precio simbólico por single o disco.
Y quien quiere, colabora contigo comprando tu música.
Pero, si quien te escucha no quiere/puede pagar, no pasa náááá.
En Bandcamp, se puede escuchar igualmente.
Así que, tutto a posto!
La conversación acerca de "a qué y quién le sirve mi dinero" está siempre muy, muy, muy sobre mi mesa. Es algo que quien me conoce, sabe que saco una y otra vez.
Por eso, como estamos en confianza, quiero traerla aquí.
Vamos suave.
La complejidad del asunto es grande.
Alex Serra lo cuenta muy bien en su vídeo a Daniel Ek.
Recomiendo mucho ese vídeo.
En mi caso, no tengo ningún contrato discográfico.
Eso me permite tener más libertad de movimiento y decisión ya que no tengo que cumplir con ningún plazo, permanencia ni triquiñuelas.
La única con quien tengo que ponerme de acuerdo es conmigo misma.
(ojo cuidao también)
Hace cuatro semanas terminé de producir una canción para una artista argentina que te presentaré pronto.
Me contaba que estaba en ese dilema:
¿Subo mi próximo disco a Spachifei o no?
Le pregunté que cuál era su conflicto y su respuesta fue contundente.
La cosa es compleja, realmente.
Creo que cada cual ha de hacer su ejercicio interior para, como canta Rubén Blades:
Decisiones, cada día.
Aprovechando las lluvias de octubre, retiré mi música de Spachifei.
Bueno, toda toda no he podido porque hay canciones que son colaboraciones y no puedo retirarla.
Está bien así.
El trámite fue relativamente fácil.
Quien me atendió en Distrokid, la distribuidora, fue genial.
Qué bien cuando nos atienden bien.
Siempre doy gracias.
Si en algún momento hay un comunicado en el que dicen que cambian la manera de gestionar el dinero que ganan a través de la música de millones de artistas, me encantará volver a compartir mis canciones allí.
Por el momento, no.
Y tampoco voy a usar la plataforma para escuchar.
He decidido retirar mi energía de ahí.
Quizás piensas que soy rígida, egoísta, idealista...
Que le estoy privando a algunas personas de mi música...
Que esto no sirve de nada porque muchas personas van a seguir usando Spotify.
¿Y sabes qué?
Respeto que pienses eso.
Lo que sea.
De verdad, lo respeto.
Y también te digo:
Todo lo que nace de una intención clara y honesta, sirve.
Mi decisión es valiosa.
¿A quién le sirve mi decisión?
Pues a mí, claro.
A mi paz mental y corporal.
Sin mí, no hay yo, ¿sabes?
Y sin "yo", no vivo.
Así que, eso.
Paz adentro.
Ahí empieza todo.
En decisiones como estas, veo lo que me influyó leer el libro de Joan Melé:
Dinero y conciencia
Y entonces...
Ahora...
¿Qué?
Hay alternativas a Spotify.
Hay una plataforma francesa que paga más justamente a artistas y no invierte en armamento militar ni inteligencia artificial para la guerra.
Toma nota:
Eso de que cuando se abre una puerta, se cierra una ventana, es verdad.
Siempre hay opciones.
La cosa es estar dispuesta al cambio.
Asumir sus consecuencias.
Prueba, error y p'alante.
A mí me cuesta mucho, lo confieso.
Por eso practico con lo que tengo en mis manos.
Poco a poco.
Reenvía este correo a quien pueda interesarle.
Es una conversación que está sobre la mesa.
Necesitamos muchas miradas para crear nuevas maneras.
Abracicos.
Que estés muy bien.
Feliz luna negra.
PS: mi próximo disco no estará en Spotify.
PS2: si que estará en mi web.
PS3: y en bandcamp.
PS4: si quieres dejar de recibir mis correos, tienes un botón abajo del todo.
PS5: sobre lo de la profundidad de Björk, cusha...
PS6: Sol en Escorpio, Luna en Escorpio, Ascendente en Escorpio.
PS7: Björk dice sobre Spotify que "es lo peor que le ha pasado a los músicos".
PS8: profundidad al cubo. Y qué manera de afinar el aguijón, carajo. Respect.
PS9: para mirar tu cielo, estoy dando fechas para dentro de unas semanas.
PS10: nunca antes había hecho 10 post-scriptums.
PS11: hoy 11.
PS12: lectura de tu carta natal, aquí.