En la cola del supermercado se aprenden muchas cosas.

Más que todos lo rios de España juntos.

Algunas lecciones son de venta.

De esas que te pueden hacer ganar mucho dinero.

En mi caso ya sabes que espanto el dinero como el jabón al aceite.

Pero no voy a quejarme ahora.

Lo curioso de las conversaciones es que hay que saber escuchar.

Saber conectar puntos es donde está la diferencia.

Pues bien.

Alguien en la cola del supermercado le pregunta a una señora.

Supongo que se conocían.

- ¿Qué tal tu dedo?

Y la señora le explica que va bien, con dolor, pero como está ahí todavía no ha ido al médico.

Luego el cajero responde que eso se quita con un viaje al caribe.

La conversación sigue sobre que se tiene que cuidar y un señor mayor se metió aportando su opinión sobre las depresiones post vacacionales.

Ya sabes que siempre hay alguien que da su opinión sin pedírsela.

Lo verdaderamente valioso, fue el comentario sobre un viaje al caribe mientras estás pasando productos por la caja del supermercado.

Quitando el hecho de que ese trabajo pueda ser sustituido por una máquina en el futuro.

La lección de ventas es que durante el trabajo estaba pensando en un deseo velado.

¡¡Quiero escapar de aquí!!

Eso te permite crear una historia para vender.

Antes habrás tenido que buscar a tu posible cliente.

Y calentarle la tarjeta.

Crear una imagen de que va a cumplir sus deseos velados.

Así conseguirás que el se monte su propio camino.

Y tu le proporcionas tu producto o servicio para conseguir ese deseo velado.

Aunque avanzo lento en la construcción de la web espero en breve que tengáis noticias.

LuisMi

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