He tenido muchas ideas.

Muchas las he tratado de llevar a las práctica.

Mi mente analítica y estructurada quería la mejor versión.

Vaya putada.

Esta mejor versión me ha hecho perder un tiempo precioso.

Tanto es así que me he olvidado de lo más importante. Los euros.

Ese vil metal.

Odiado por la gran mayoría, pero amándolo para hacerse ricos. Más bien para gastarselo.

Y los euros aparecen si hay un proceso de venta.

Siempre me la ha sudado.

El proceso de venta.

Cómo si pudiera pagar en el supermercado con abrazos.

Así que tener un proceso de venta es el primer paso para poder vender la idea.

Incluso te digo que la idea es secundaria.

Haz una búsqueda en Google sobre lo que quieres vender y seguro que ya existe alguna herramienta que lo hace.

Y si no existe, estate alerta porque puede que no haya mercado suficiente.

Así que teniendo una marca personal, o teniendo una audiencia, que son dos cosas que van unidas.

Puedes testear tu idea.

Lanzas el globo sonda, y si hay euros, tira adelante.

Y si encima te dicen n que es mala idea, es otra buenas señal.

Así que hagas lo que hagas, empezar con algo te dará la oportunidad de mostrar cosas para que tú mente inquieta pueda estar tranquila y ver si funciona.

Estoy al otro lado del mail.