😩 El profesional agobiado
May 23, 2024 4:30 am
Hola , ¿cómo estás?,
hoy te voy a contar una de esas historias cotidianas, que cualquiera podemos oír. Sólo estando atentos escuchando a nuestro alrededor, eso sí, también te digo una cosa:
"Es curioso como en unos breves segundos antes de saber la verdad. Nuestro cerebro es capaz de sacar conclusiones precipitadas y montar su propia película."
y a eso vamos...
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👇 aquí te los dejo.
Un fin de semana intenso
Ha sido una semana dura de trabajo, pero el finde no se quedo corto, estuvo repleto de actividades y también de curro "extra".
Sí, supongo que a ti también te pasa, llegas a esos días esperados, pero en ocasiones hay findes que son más intensos que la propia semana si cabe.
Este en concreto fue uno de ellos. El sábado partido de fútbol del pequeño, ir a comprar, preparar comida, y por la tarde ir a ver un monólogo genial, vale, esto no es un esfuerzo, pero fue intenso 😅 ✳️.
El domingo ciclo indoor 🚴♂️ Baño Turco 😶🌫️🧘🏻♂️ en el gimnasio 🏋️♀️, y luego movimiento de caderas, piernas y brazos en la mudanza del local. La tarde del domingo para descansar.
Vaaaale igual no fue tan intenso, pero entre las agujetas de reirme, y las agujetas del body... ¡Oye… Pues Mejor! 😅
Y llega la nueva semana...
En el gimnasio 🏋️♀️ se oyen cosas
Es lunes por la tarde, 14 de mayo, son las 20:00 de la tarde, ha sido un sesión de body balance reconstituyente, de lo mejor para estirar bien todo el cuerpo.
Terminada al sesión del gym, me voy a la ducha, al salir escucho la siguiente frase del compañero de taquilla:
“Pues ahora me meto en la sauna, que me espera una dura noche de trabajo.”
Y yo que soy una persona por naturaleza optimista, pienso:
“Olé, y ole, el tío viene a meterse caña, y luego una sauna 🧖♂️. Es bien. Porque claro después le toca meterse un turno de noche entre espalda y espalda, con dos 🪺. Yo no sé si podría. Aún recuerdo cuando trabajaba a turnos y lo duro que era."
Llegados a este punto de mis pensamientos, ya le entra la curiosidad a mi cerebro:
“¿Será mecánico en alguna empresa, operario de producción, conductor de autobuses?”
Pues no. Es curioso como en unos breves segundos antes de saber la verdad. Nuestro cerebro es capaz de sacar conclusiones precipitadas y montar su propia película.
😩 El profesional agobiado
No, ese compañero de taquilla no estaba hablándome a mí, no te vayas a creer, no. Pero claro, tan cerca, te cambias en un gimnasio que puedes escuchar y ver de todo, jajaja.
Por cierto, no te he descrito a este señor. Es un hombre calvo 👨🦲 de unos 30 y tantos años, y con bastantes tatuajes…¿quizás por eso pensé en oficios manuales y rudos?.
Como te decía, el señor calvo y con pendiente, sí llevaba pendiente, son datos que están ahí, objetivos. Estaba hablando a otro hombre que se cambiaba al lado. El cual con un tono un poco de sorpresa le pregunta:
“¿Ah, sí, te toca trabajar esta noche?”
Y aquí viene lo bueno, el calvo de pendiente y tatuajes dice, agárrate:
“Pues sí, me va a tocar estarme hasta tarde, porque resulta que soy el único PROFESOR que esta semana que va a hacer actividades con los chicos, y me toca prepararlas 😳.”
Espera que sigue…
“Y encima me han puesto mal todo el planning de actividades y tengo un follón”
Aquí reconozco que me he perdido. No sé a que se refiere, supongo que alguien le toca su calendario-outlook y eso le provoca estrés, no sé, y tendrá que pegarse toda la noche arreglándolo, igual que preparando las actividades de los críos.
Y no creas que se queda ahí acaba todo, no, espera que sigue…
“Y además Pedro el otro profesor, me ha pedido que le ayude con su presentación power point porque no sabe montarla, y claro, me toca ayudarle.”
En ese momento mi cerebro 🧠 ya se está compadeciendo de ese pobre profesor, estresado, que pasará la noche en vela con todo lo que acabo de oír.
Sólo espero que le vaya bien la sauna de 10 minutos y se relaje profundamente, para que esos niños disfruten de esas actividades que está preparando con sumo cariño durante la noche.
También espero que pueda organizar su planning de actividades, y también que le ayude a preparar bien a ese otro profesor esa presentación power-point (esto último creo que no lo iba a hacer por la noche, sino al día siguiente).
Lo dicho, sólo espero que duerma alguna hora esta noche y esté preparado para el largo día con los niños en la escuela.
Aún sigue, no te creas…
El profesor calvo con pendiente y tatuajes (datos objetivos, recuerda) sigue hablando:
“Sí, pues eso, me meto a la sauna que así además estiro un poco el tiempo y llego tarde a casa, con un poco de suerte le habrá dado tiempo a mi mujer a acostar a nuestra hija y yo puedo ponerme a todo. Tendré que hacerme la cena, eso sí, pero tengo suerte, mi mujer me apoya en estas tareas en general, sobre todo con la chica. Así yo podré trabajar esta noche.”
Esteeeeee, ¿perdona?. No he entendido nada. Me dan ganas de hacerle unas cuantas preguntas abiertas, en modo coach 🧢, ya sabes, pero no.
No le conozco de nada, es la primera vez en casi 3 años que lo veo en el gimnasio 🏋️♀️. Así que termino de cambiarme, el profesor agobiado se va a su sesión de sauna, y yo me voy a mi casa.
Mejor no comparar, mejor no juzgar.
De camino a casa, no me lo puedo quitar de la cabeza. Pobrecito 😅...
Mi cerebro trata de hacer la comparativa entre el trabajo de este profesor calvo con pendiente, tatuajes y agobiado, con lo que me espera a mí esta semana que acaba de empezar. Pero comparar no es bien. Y juzgar alegremente tampoco es bien.
Es verdad que a mí me hizo gracia, la verdad, lo de algunos profesores agobiados es algo que se me escapa, lo siento. Y te puedo asegurar que conozco a varios profesores muy cercanos.
La última queja que escuche de uno de estos profesores cercanos que te digo fue las pocas vacaciones que tenían este año para semana santa:
“Este año sólo tenemos 12 días de vacaciones para Semana Santa, es una vergüenza, en Francia tienen 2 semanas.”
“Amos a ver, ¿En serio?” yo me considero un privilegiado por tener 4 días en el puente de semana santa. Joder, no sé tu, pero yo me he perdido algo.
Pero mejor no juzgar, no juzgar, no juzgar...
Como todo en este mundo, hay profesores y profesores, esos que disfrutan de su vocación, que marcan a los niños con sus lecciones y sus valores.
Y luego están los Profesores indignados y agobiados. Ojo que sé que indignados y agobiados hay en todas las profesiones.
También te digo que alguno de esos profesores cercanos que te comento, me recuerden cada vez que pueden:
"Pues yo tengo 2 meses de vacaciones seguidos."
Y yo siempre les respondo:
¡Oye… Pues Mejor! 😅 ... para ti.. claro, jajajaja
Algo se me escapa. Quizás tendría que haberme hecho profesor para saber qué ocurre realmente.
Así que como te digo, mejor dejar de comparar, y mejor dejar de juzgar.
Una historia de unos minutos
Saca las conclusiones que quieras, yo sólo te digo que esta historia surgió de apenas escuchar 5 minutos una covnersación-queja ajena, en el vestuario del gimnasio 🏋️♀️ mientras nos veíamos los tatuajes, los culos, y nos oíamos los lamentos 😅 (que no los olíamos 🤣🤣🤣)
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Y hasta aquí la Newsletter 🗞️ de hoy:
😩 El profesional agobiado ¡Oye… Pues Mejor! 😅
Veamos las preguntas de hoy 👇
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Las 5 preguntas de hoy 🧢
1️⃣ ¿Qué haces si te sientes agobiado ?
2️⃣ ¿Qué herramientas tienes para combatir ese agobio?
3️⃣ ¿Cómo te has sentido con esta historia del profesor agobiado ?
4️⃣ ¿Qué dice todo lo anterior de ti ?
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Postdatas
P.D. 1: El monólogo que te cuento fue de Galder Varas, bueno, muy bueno. Me lo pasé genial, y encima con una parte importante de improvisación en un monólogo. Mucho que reír, mucho que aprender.
P.D. 2: Ya sabes, sin compromiso y sin límites (bueno sí, 15 minutos).
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Y recuerda: ¡Carpe Diem, Memento Morí!
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