Hay gente que llega al coaching con muchas ganas. De esas que dicen con tono solemne:

—“Yo quiero cambiar…”

Y claro, suena bien. Lo que pasa es que:

“Querer no es hacer. Ni mucho menos cambiar.”

Amos a ver que te lo explico en 2 punticos:

• El querer vive del consciente. Es bonito, elegante, educado. Dice cosas como “esto me gusta”, “voy a intentarlo”, “me lo estoy planteando”, “igual me lanzo”.
• Pero el creer… el creer está a otro nivel. El creer opera en la trastienda del cerebro. En el inconsciente*. Ahí donde se cuecen las verdaderas decisiones.
• *(Por cierto en la última postdata te explico la diferencia entre subconsciente e inconsciente, no es lo mismo). ¡No me seas incontinente, digo inconsciente!

Entonces, una par de preguntas de esas directas:

¿Quieres dejar de procrastinar? Bien. Pero si en el fondo crees que no eres constante… tu mente primero y tu cuerpo a después ganan la batalla.

¿Quieres reinventarte? Estupendo. Pero si crees que no mereces más… no pasas de la primera página del CV nuevo. Creo que me entiendo, ¿no?

Por eso, cuando alguien empieza un proceso de coaching, suelo decirle algo así:

—“Espera, no me cuentes lo que quieres de tirón, bueno sí… pero luego te preguntaré por lo que crees, y por lo qué no crees aún. Y ya si eso luego te vuelvo a preguntar por lo que quieres.”

Porque ahí está el tema.

Y no, no hace falta recitar frases de Mr. Wonderful. Ni levantarte cada mañana diciendo “yo puedo” como si fueras Rocky antes de subir las escaleras.

“Lo que hace falta para alcanzar lo que quieres, es revisar lo que hay dentro. En serio. Lo que tú crees de ti mismo, de tu historia y de tus límites.”

Si te atreves a revisar lo que hay adentro:

Empieza por aquí

— “Porque al final, no somos lo que queremos. Somos lo que creemos posible.”

Y es que, lo siento, pero te lo vuelvo a repetir:

• No cambias cuando lo deseas. Cambias cuando lo crees inevitable.

Ya lo dijo una sabia de esto, conferencista, abogada y escritora estadounidense:

“No se trata de cuánto lo quieres, sino de cuánto lo crees posible.”

— Mel Robbins

4 Preguntas para Creer más:

1. ¿Qué dices que quieres, pero no terminas de creerte?
2. ¿Qué creencia te está frenando y lo sabes?
3. ¿Qué pasaría si fueras tu mayor aliado en vez de tu peor crítico?
4. ¿Qué harías hoy si dejaras de dudar?

Y recuerda… la 5ª pregunta te la haré solo si me respondes alguna de las anteriores. En serio, responde a una de ellas, o a las 4 y te envío la 5ª

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P.D. No hay botón mágico. Pero si empiezas a creer, ya estás caminando.

P.D. 2: El coaching no es homeopatía (como lo llama un compañero mío). Ni brujería. NO. Es método. Pero ¡oye… pues mejor!, ¿no? 😅

P.D. 3: *No confundir Subconsciente con Inconciente:

El Subconsciente → es el piloto automático. Funciona con hábitos, creencias, memoria, esas cosas.

El Inconsciente → son las emociones escondidas, los impulsos, los traumas, vamos lo que no se ve ni con linterna frontal.

PD 4: Hoy es el día, no te lo puedes perder si vives en Zaragoza, aún estás a tiempo: info.zaragoza@efic.es

Un abrazo con método,

Chema Portero

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